Branding es un término en inglés que se refiere al proceso de creación y desarrollo de una marca. Una marca (brand) es un concepto intangible, ya que no podemos tocarlo, pero nos ayuda a identificar y diferenciar un producto, empresa o persona, de otra.

Por medio de este proceso de branding, se crea una imagen que ayuda a las marcas a posicionarse en el gusto de los consumidores de sus productos o los usuarios de sus servicios.

El objetivo principal del branding es hacer que los clientes se enamoren de la marca, de tal modo que se ésta, se vuelva irremplazable, lo cual significa que no van a querer comprar otro producto o servicio de la misma categoría porque en su mente, su marca favorita es la mejor, y su lealtad es única.

Cuando has hecho un buen trabajo en este proceso, el mercado en general reconoce la marca, el tipo de producto o servicio al que se refiere, el nivel de calidad y lo que representa. También facilita la adquisición de nuevos clientes y aumenta la lealtad de los clientes existentes.

Esto se traduce en el incremento de las ventas con un menor esfuerzo, porque simplemente el hecho de que el mercado te conozca, te abre las puertas a que cuando ellos necesiten el tipo de producto o servicio que ofreces, te tomarán en cuenta durante el proceso de compra, será más fácil convertirlos en clientes, y los que ya son, podrán referir a otros con gusto, ya que están satisfechos y no quieren dejar de experimentar los beneficios que les brinda ese producto o servicio.

Cambiar a otras marcas puede causar ansiedad, ya que cuando no conoces algo no tienes la confianza de que van a cumplir lo que prometen, y lo que los clientes quieren es confiar en que su marca de elección va a ser consistente en la calidad y en la resolución de sus problemas o necesidades.

Entonces, ¿Cuándo deberíamos iniciar este proceso de Branding?

  1. Cuando vas a iniciar una nueva empresa o crear un nuevo producto.  Si tomas tiempo de planear e invertir desde el lanzamiento, el rendimiento de tu inversión será mayor, y te posicionarás más rápidamente en el gusto de tus clientes, aumentando las posibilidades de éxito de tu proyecto.
  2. Cuando quieres revitalizar la identidad de una marca existente. Cuando comparas tu marca con tus competidores y te das cuenta que tu marca se mira inferior, que parece de baja calidad por el tipo de materiales que has usado para promover tu negocio, el tipo de uniformes que has usado, materiales impresos, etc. es momento de refrescar esa imagen y posicionarte adecuadamente.
  3. Cuando le cambias de nombre a tu negocio. A veces, después de varios años nos damos cuenta que el nombre que tenía nuestro negocio no refleja lo que hacemos o al tipo de cliente que queremos atraer, o resulta que hay un conflicto con la oficina de registro de marcas porque alguien ya tiene registrado un nombre similar al tuyo en tu misma categoria, y es necesario cambiarlo.
  4. Cuando queremos crear un sistema integral de identidad. Esto quiere decir que tal vez ya tienes tiempo en el mercado, pero has estado tan ocupado que no te has dado cuenta que en realidad no tienes una identidad definida, ya que todos tus materiales de promoción parece que son de empresas diferentes pero con el mismo nombre. Esto confunde a tus clientes ya que no has tenido consistencia con tu marca.
  5. Cuando quieres reposicionar tu marca. Tal vez ya tienes tiempo con tu negocio y has adquirido una especialidad o creado algo único y ahora quieres atraer a un mercado nuevo que te pueda pagar mejor por tus productos o servicios. 

Estas son algunos ejemplos de cuándo deberías iniciar el proceso de branding. La realidad es que si quieres que el valor de tu negocio aumente, y aún no has hecho nada para consolidar tu marca, debes iniciar ya.

Recuerda que una marca exitosa, nos ayuda a generar ventas más fácil, pero para que la marca sea exitosa se requiere planeación y una buena ejecución.

Si necesitas ayuda o tienes cualquier duda sobre como iniciar este proceso, contacta a un especialista que pueda ayudarte a crear tu marca millonaria.